Una visita al pediatra lleva a Luna a admitir que tiene un problema muy personal: ¡está nerviosa por comenzar el cuarto grado en su nueva escuela! Para ayudarla, su madre la lleva a ver a Tere, una terapeuta que le enseña cómo entender sus emociones. Tere le muestra ejercicios de respiración que la calman y, en fin, le ayudan a manejar su ansiedad.
La verdadera prueba llega el primer día de clases, cuando Luna debe demostrar su valentía.
Con ilustraciones elaboradas y narración relajante, Solo respira explora cómo podemos ayudar a nuestros niños a superar sus miedos. A sus hijos les encantará este libro, a medida que empiecen a descubrir que las dificultades que enfrentan en sus vidas no son tan aterradoras como previamente pensaban.